La marcha hasta las Parras fué muy bien, pues la mañana estaba nublada y la temperatura acompañó. Al llegar un remojón de pies en el lavadero del pueblo con un agua muy fresca, así como la de la fuente de al lado. Después de comer se abrió el banco y pudimos sacar dinero para comprar chuches, que ya las estábamos echando de menos.
Por la tarde jugamos a Furos y nos fuimos hasta Jaganta, donde visitamos una Almazara del siglo XVII y realizamos un juego pos las calles.
Después de escuchar unas leyendas por el pueblo, en plan tranquilo, nos fuimos a dormir.
Gracias por ser tan comprensivos ayer con las llamadas de teléfono, recordar que hoy si que podéis llamar en los dos horarios.
Hasta mañana.
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